martes, 16 de marzo de 2010

El canto de las ranas


Las ranas cantan las canciones Opus N. 7 CRUA CRUA en Re menor de Dimitri Saltarin.


Caco dixit.

No quiero ser Peter Pan

No quiero vivir en un mundo de fantasía donde todo sea lindo.

No quiero vivir en un mundo siempre alegre y perfecto.

No quiero escuchar sólo tu risa.

No quiero desarmar mis jugetes para no saber volver a armarlos.


Quiero poder juntar tus lágrimas y beber de ellas, quiero que ellas me rieguen el corazón y me guíen a tus heridas. Quiero que me digan dónde te duele, para poder besarte esas cicatrices que molestan.
Quiero poder llorar con vos para despues reirnos de nuestros ojos de sapo hinchados. Quiero vivir en tu mundo imperfecto donde las cosas a veces no funcionan. Quiero que vivas en el mío, lleno de agujeros. Quiero que mi beso en la espalda cada mañana te traiga el día, aunque a veces tenga que besarte horas para que veas mi luz. Quiero que tu beso en la frente me traiga lindos sueños por las noches, aunque a veces tengas que dármelo después de una horrible pesadilla.

No quiero ser Peter Pan.

Quiero ser tu mujer, la que te levanta cuando te caés y la que vuela con vos en alfombra mágica cuando el sol brilla y hay risa.

No quiero ser Peter Pan.

jueves, 11 de marzo de 2010

Titi y los baños.

Somos todos grandes, todos sabemos cómo es y no hay necesidad de dramatizar, pero así y todo cada vez que me pasa me pregunto lo mismo.

Porqué en los baños públicos la pared que divide los inodoros nunca llega hasta el piso????

Dejémonos de joder señores. Dejemos de pretender que no nos importa y que lo tenemos asumido. Cuando una se sienta a hacer un pichín en el baño de un shopping, no está bueno que el culo esté casi a la altura del final del panel divisorio. Peor aún cuando el piso es de ese brillante porcelanato que siempre está ultrapulcro y que te hace de espejo, porque ahí ves cómo la de al lado adopta "la posición", se pone a mear con pésima puntería, se limpia el traste y se contorsiona para subirse el pantalón, todo con la cartera colgada del cogote!
No es justo que estos pisos reflejen la miserable intimidad escatológica de las personas.

Mi último viaje, incluía una serie de conciertos con vestuario de época. Hablamos de corsé con tiritas y una falda tan enorme que me costaba caminar. Estos vestidos jamás son hechos a medida, y el caso era que me quedaba tremendamente chiquito... Esto acotaba bastante mis posibilidades motrices y luego de haberlo usado ya unas cuantas veces, aprendí que es mucho mejor ir a visitar el toilette antes de ponérmelo, para evitar complicaciones y falta de aire.

Todo se complicó cuando justo unos diez minutos antes del concierto y ya vestida, a la naturaleza no se le ocurrió mejor cosa que hacer un llamado imperativo. Traté de aguantar, de convencerme de que todo era una ilusión mía, pero no. Se estaba gestando un serio problema intestinal.

Corrí al baño y entré como alma que lleva el diablo y me topé de frente con un chico que limpiaba el piso con una dedicación poco antes vista. Claro, pensé yo. Estos son los responsables de que la de al lado te vea el culo reflejado.

El chico se disculpó y salió del baño, y yo entré corriendo al cubículo más alejado de la puerta, como para que no se escuchen los peditos. Cerré la puerta y entré a luchar con la gigante falda de ese vestido choto, y me acomodé en el trono.

Luego de haber atacado con toda la artillería, me dispuse nuevamente a luchar contra la falda y a tratar de incorporarme cuando escuché la voz del chico. Disculpe, si no le molesta voy a ir siguiendo con los otros cubículos porque ya termina mi turno y me tengo que ir... Y así fue que el cretino entró nuevamente con su puta mopa al cubículo de al lado desde donde, gracias al pulcro porcelanato y al maldito panel, presenció mi lucha descarnada contra mi vestuario.

Al salir, toda transpirada, sonreí como una diva y salí del diminutísimo espacio con mi enorme vestido como si fuera María Callas. El hijo de mi putas, no tuvo mejor idea que darme conversación mientras se iba acercando al cubículo que yo acababa de vaciar (y de clausurar) Aguanté todo lo que pude, pero finalmente puse la excusa de que se hacia tarde y salí corriendo del baño antes de tener que presenciar que el pobre pibe se desmaye del olor a mierda que dejé en el mismísimo lugar donde él prolijamente pensaba embellecer el piso.

Cagar en un baño público, es una verdadera cagada.

jueves, 4 de marzo de 2010

Entiendo...

Entiendo?